La demanda de carne aumentará, pero el país no debe esperar mejores precios internacionales, sino bajar costos y mejorar niveles de acceso a los mercados.

Conferencia de la Asociación de Consignatarios de Ganado (ACG) en Montevideo.
La Asociación de Consignatarios de Ganado (ACG) realizó ayer un seminario de intercambio exclusivo para socios de la gremial en el hotel Hampton by Hilton en Montevideo denominado “El complejo cárnico: perspectivas y desafíos”.
Los disertantes invitados fueron Federico Stanham, presidente del Instituto Nacional de Carnes (Inac); Jorge Acosta, gerente de Información de Inac, Marcos Guigou, director de Agronegocios del Plata (ADP); y Eduardo Urgal, director de Frigorífico Pando y directivo de la Cámara de la Industria Frigorífica.
En primera instancia, Jorge Acosta destacó la necesidad de “seguir valorizando los productos más caros y de más volumen” en los mercados internacionales, entendiendo que “la carne no existe”, sino que “se debe dar valor a todo el animal, a los más de 100 cortes que se exportan”.
También resaltó las ventajas que tiene el país al contar con mercados que son grandes importadores y cuentan a futuro con un consumo creciente de carne vacuna. “Es una buena noticia, el 70% del total exportado se destina a China y los Estados Unidos”, dijo Acosta.
Por otro lado, Federico Stanham reflexionó sobre el valor de la carne vacuna y recomendó a “no esperar cambios en el precio del producto”, sino mejorar algunos aspectos que impiden reducir costos y mejorar los márgenes de ganancias, como las pérdidas medidas controlables que representan unos US$ 31 millones anuales.
Mientras que Marcos Guigou entiende que el mundo de la carne y la ganadería uruguaya es compleja, proyecta muchos desafíos pero con muy buenas perspectivas. “Es un sector en el que se manejan muchas incertidumbres, al igual que la agricultura, pero con mayor nivel de amplificación”, resaltó el Director de ADP.
Por último Eduardo Urgal habló sobre la competitividad y aseguró que vendrá “por las buenas o por las malas, porque somos un país agro exportador y, en segundo lugar, un país turístico, por lo que precisa el ingreso en dólares”. También considera “indispensable construir cadenas de aprovisionamiento con visión de mediano y largo plazo, así como lograr que se produzcan más kilos por carcasa (hay una clara limitante en la cantidad de animales), además de fidelizar a las puntas de la cadena”.