“El Puerto de Montevideo ya avanza hacia el futuro”, dice TCP
Una vez finalizadas las obras comprometidas por Katoen Natie, el movimiento de contenedores en el puerto alcanzará niveles superiores de eficiencia en el manejo de la carga en la región.
Nuestro escenario portuario, que conocemos y amamos desde hace 70 años, aspiramos a que sea un símil de Singapur en el mundo marítimo y seguiremos en esa línea de pensamiento.
Sin embargo, nos hemos referido escasamente a uno de los más valiosos actores de este ámbito portuario, que son sin duda las grúas (pórtico) montadas sobre rieles para movilizar contenedores, cuyo desarrollo avanza con el de los barcos. La primera de estas grúas llegó a Montevideo en 1983 y fue instalada en el Muelle de Escala por la ANP en 1985, prestando servicios por casi treinta años. Junto con las grúas pórtico incorporadas por Katoen Natie a partir de 2001 en la Terminal Cuenca del Plata (TCP) llegaron a sumar hasta 8 en forma simultánea, cambiando para siempre la imagen de la bahía. Esas moles metálicas que pesan hasta 1.600 toneladas y que por su altura son visibles a grandes distancias, se convirtieron en un símbolo de modernidad para nuestro puerto. Se trata de equipamiento fundamental para el manejo profesional de las mercaderías, definen la especialización de una terminal, permiten gran velocidad en la operativa de los buques portacontenedores y son de uso habitual en los principales puertos del mundo, donde se las puede ver sobre los muelles moviendo miles de toneladas por minuto.
En Montevideo, las grúas pórtico marcan un método de indiscutible eficiencia en la operación de contenedores. En el plan de inversiones comprometido por Katoen Natie en el Acuerdo con el Estado, en el cual es elemento principal la construcción a corto plazo de un muelle de más de 700 metros de largo (dos atraques) diseñado para permitir la operación de buques con calados de hasta 14m, se prevé incorporar en una primera etapa, un mínimo de 5 a 6 grúas pórtico, adicionales a las 7 ya existentes en el Muelle de Escala. Y nos entusiasma pensar esto.
Aunque en los puertos se operan otros tipos de grúas para movilizar contenedores, las grúas pórtico montadas sobre rieles son las ideales. En TCP, con hasta cuatro de ellas operando simultáneamente sobre buques de gran tamaño, se han descargado y cargado más de 100 contenedores por hora, logrando reducir sensiblemente el tiempo de estadía en puerto de los navíos, por lo cual un portacontenedores convencional está en condiciones de retirarse doce horas después de su arribo al puerto, habiendo cargado y descargado más de mil contenedores, equivalente a aproximadamente 20.000 toneladas. De esa manera, tendrá tiempo suficiente para llegar a su próximo destino a velocidad controlada, sin exigir sus máquinas, optimizando el consumo de combustible y reduciendo el grado de contaminación ambiental, a la vez que haciendo más eficiente el funcionamiento de los puertos y el transporte marítimo, en beneficio del comercio internacional.
Una vez finalizadas las obras comprometidas por Katoen Natie, el movimiento de contenedores en el puerto alcanzará niveles superiores de eficiencia en el manejo de la carga en la región y de esta forma el Puerto de Montevideo, con la ventaja adicional de su ubicación geográfica, que se traduce en menos horas de navegación, menos consumo de combustible, menos riesgos de navegar en canales angostos con pocos lugares de cruce y menores costos de servicios auxiliares a la navegación, confirma a nuestro entender -puede que nos equivoquemos pero queremos estar en la línea de pensamiento correcta-, sus mejores condiciones respecto al puerto de Buenos Aires.
La obra de extensión del Muelle de Escala ya ejecutada por TCP e inaugurada en 2010 y los puestos de atraque del nuevo muelle en construcción permitirán la operación de buques que salgan de Montevideo con calados de hasta 14m. y podrá colocar a la terminal en los primeros lugares en la consideración de las empresas navieras que operan en la región y, por la vía de estos hechos, competir en mejores condiciones con sus rivales regionales, competidores de afuera, ofreciendo servicios eficientes y complementarios al comercio exterior de esta zona de la costa este de América del Sur.
El Acuerdo logrado entre el Gobierno y Katoen Natie parece estar en consonancia con el cambio que se espera con el arribo en un plazo no lejano de buques de mayores dimensiones y capacidades de carga superiores a los 14.000 TEUS y para dar satisfacción a esas exigencias, la empresa ha asumido el desafío de quedarse en el Uruguay e invertir en el puerto de Montevideo en el proyecto anunciado. Es una fuerte señal al mundo marítimo que estamos construyendo el puerto del futuro, y a eso apostamos.
Y en esto tenemos que estar todos de acuerdo. El combate es de adentro hacia afuera. Seamos claros, no estamos pensando en ser la solución para el transporte marítimo del comercio exterior del Uruguay que es muy pequeño, sino que estamos anhelando ser el puerto hub de la región. ¿Por qué no podemos ser un símil de Singapur que atiende la carga contenerizada de 10 países y la distribuye al mundo?
La imagen habitual de la Dársena 2 del puerto de Montevideo, nos muestra nuevamente un gran avance en las obras de cerramiento del mega depósito de almacenaje de la terminal de celulosa de UPM, en tanto continúan las obras de construcción de su muelle de operaciones.
En el Muelle C-D se observa la operativa del bulk carrier Mineral Gent, que en vez de mineral se llevará a China una carga de 90.000 toneladas de rolos de pino de distintas dimensiones provenientes de diversas partes del país. Es una operación que durará aproximadamente 10 días.
También se observa en la terminal de graneles TGM la carga de un granelero y sobre los muelles 8 y 9 la operación de un portacontenedores de MSC.
Estamos contentos, debido a que el puerto de Montevideo se encuentra activo.